DECONSTRUIR LA ACTUACIÓN por Camila Sosa Villada
DECONSTRUIR LA ACTUACIÓN
por Camila Sosa Villada
Lunes de Marzo, Abril, Mayo, Junio
de 18:30 a 21:30 hs
DocumentA/Escénicas – Lima 364 – Córdoba
COMIENZA EL 11/03 – INSCRIPCIONES A TRAVÉS DEL FORMULARIO DE LA WEB
Costo mensual: $800
Inscripción: $100
¿Cómo se construye el trabajo de los actores y de las actrices? ¿Cuáles son las herramientas puestas a jugar en el proceso de creación y entrenamiento? ¿Qué apostamos en el juego de la actuación?
A menudo, los actores y las actrices, aprendemos una forma, una manera de actuar que es nuestro paradigma. Construimos la imagen del actor o la actriz que queremos ser, la tomamos de nuestrxs maestrxs, de nuestros actores o actrices favoritos, repetimos modos, abrazamos una idea de cómo debe ser la actuación. Esto es, en realidad, reducir nuestra capacidad. Acotamos los límites de nuestra voz y nuestro cuerpo a esa idea de actuación que nos es ajena. Pero lo cierto es que, a cada actor y a cada actriz, lx auspician deseos diferentes, por eso es que hay tantos y tantos actores y cada uno tiene una visión diferente del oficio. Creo que nuestro trabajo consiste en expandir los límites, los de la escena y los de la actuación, arrojarnos al vacío de no saber, de habitar espacios que van construyéndose desde la nada y no desde esta imagen que obtuvimos de los años de aprendices y espectadorxs.
Este seminario, que comenzó hace cuatro años, intenta desarticular los vicios adquiridos a veces inconscientemente, a veces no, y que perjudican la espontaneidad, la imprevisibilidad, ambas vitales en el trabajo de la actuación. ¿Cómo podría vivir la escena, cómo podría bajar el duende a un espacio consabido, a un lugar forzado donde nuestra pretensión es más importante que lo requerido por una obra o por un personaje?
A través del entrenamiento del cuerpo y de la inteligencia escénica, sostenida en la improvisación a partir de textos muy significativos de la dramaturgia universal, entrenaremos la visión el vacío, como bien decía Marguerite Yourcenar.
Ahora que la palabra deconstrucción está tan en boga, considero un buen momento para ponerla en práctica también en el teatro. Enfrentarnos a una nueva manera de decir, a una nueva manera de abordar los textos y la creación de un personaje. Pararse al borde del abismo, cerrar los ojos y lanzarse. Sin vértigo no existe el teatro.
Al vacío caeremos.